Una posición cada día más exigente: los sueños y retos de los guardametas de Sesiones AFE
Los tres se preparan para tener una salida laboral cuando se retiren, pero por ahora ese momento queda muy lejano y todavía tienen muchos objetivos que alcanzar. Alejandro Marcano (Santander, 9/8/1983), Adrián Sánchez (Simancas, Valladolid, 16/03/1998) y Patxi Sánchez (Palma de Mallorca, 27/5/1997) son los tres guardametas convocados para participar en la XXIV edición de Sesiones AFE, futbolistas perfectamente preparados para integrarse de inmediato en algún club.
Porteros de diferentes características, con referentes de primer nivel y con muchos sueños por cumplir todavía. Los tres con la suficiente experiencia, pese a su juventud, para rendir a la perfección allá donde vayan, ya sea en España o en el extranjero.
Un futbolista más
Alejandro Marcano tiene una dilatada trayectoria, con la Comunidad Valenciana como epicentro de su vida deportiva durante los últimos años, en los que ha jugado en Novelda C.F., C.D. Eldense, C.F. La Nucía, Atzeneta U.E. y Atlético Saguntino. Son muchas las experiencias acumuladas, “con muchos momentos buenos vividos, como algún ‘play off’ por el ascenso disputado. También recuerdo, a nivel individual, un récord de imbatibilidad conseguido en el Novelda C.F.”.
“Desde pequeño me llamó mucho la atención la posición de guardameta”, recuerda, “porque es un futbolista diferente y, además, uno de mis abuelos jugaba en esa demarcación”.
Considera a la hora de definirse que “soy ágil, rápido y regular, sin olvidar la concentración. Creo que son cualidades muy importantes para un portero”.
Tiene claro que es una posición que “ha evolucionado mucho en los últimos años. Ahora se le exige muchísimo más que antes al portero. Debe ser un futbolista más de campo a la hora de jugar el balón con los pies. Ya no sólo se trata de parar… La toma de decisiones es muy difícil porque cualquier error se paga muy caro”.
“Estoy viviendo una experiencia muy bonita en Sesiones AFE, creo que debemos aprovechar esta oportunidad todos los que estamos concentrados”, afirma Alejandro, porque “todos los medios que tenemos son profesionales, desde el cuerpo técnico hasta las instalaciones pasando por los entrenamientos”. “Insisto, debemos aprovechar esta oportunidad que nos brinda AFE para aprender y para estar en forma para cuando llegue una oportunidad”, resume.
“Realmente no me planteo nada en cuanto a ofertas, lo que quiero es seguir disfrutando del fútbol”, explica el cántabro, que tiene claro que “queda Marcano para rato. Creo que puedo dar un rendimiento inmediato en el equipo que me contrate”.
Opositando para ingresar en Correos, Alejandro anima a las nuevas generaciones de guardametas “a disfrutar y aprender a diario, pues es una posición muy complicada, sobre todo a nivel mental, porque se te mide por errores”.
Margen de mejora
Inició su etapa de futbolista senior en el filial del R.S.D. Alcalá, siguiendo su periplo en el A.D. Parla y la última temporada defendió la camiseta del Talavera C.F. en Segunda B. “En esta última etapa aprendí mucho, tanto del cuerpo técnico como de mis compañeros”, comenta Adrián Sánchez.
Es portero porque “de niño veía mucho fútbol y me fijé en Iker Casillas, el jugador que más me llamó la atención. Era mi ídolo y me gustaba mucho todo lo que hacía. Siempre he sido portero, nunca jugador de campo”.
Estima que sus características son similares a las de su referente, “soy bastante ágil, mando mucho en el área y me manejo bien entre los tres palos”, aunque tiene claro que “en el fútbol moderno un guardameta debe tener todo, deben estar perfectamente equilibradas todas las facetas”.
“Estas Sesiones AFE suponen una gran oportunidad y tengo mucha ilusión”, dice Adrián, añadiendo que “en cada entrenamiento tratamos de mejorar en todos los aspectos”. A la espera de una buena oferta, reconoce que “me gustaría disfrutar de nuevo del fútbol. Soy joven y todavía tengo margen de mejora”.
Estudiante de CAFYD (Ciencias de la Actividad Física y del Deporte), “me queda poco para acabar la carrera”, garantiza profesionalidad al club que le contrate porque “nunca doy problemas, juegue o no juegue, siempre respeto las decisiones del entrenador y nunca pongo malas caras. Además, me considero una persona muy trabajadora y en todo momento con el objetivo de aprender”.
Parar y mandar
Cuando acabó su etapa juvenil en el C.D. Ebro, Patxi Sánchez empezó otra en Tercera División en diferentes clubes de Mallorca, volviendo a la península para jugar en el Real Avilés, siendo el C.D. Eldense el último club en el que militó. El portero mallorquín reconoce que “definirse a uno mismo es complicado, pero creo que soy un portero con una gran envergadura, muy seguro por arriba, tengo capacidad de mando y creo que destaco por mi capacidad táctica” a la hora de leer el juego.
“Lo de portero surgió cuando tenía 6 años y me preguntaron de qué quería jugar. Y desde entonces me gustó tirarme al suelo”, dice con una sonrisa en la boca.
Con dos metros de estatura, cree que esa envergadura “es buena para unas cosas y mala para otras. Hay aspectos en los que tienen ventaja porteros de 1,80 y yo las tengo en otras por medir 2 metros. Por ejemplo, la agilidad de un portero más bajo no la tengo yo”.
Sí cree que “la posición de portero, hoy en día, está demasiado orientada a ser un futbolista más dentro del terreno de juego. Al fin y al cabo, debe parar y ofrecer seguridad al equipo, pero muchas veces se sobreentiende que debe ser un mediocentro más y no debe ser así en mi opinión. Para mí, insisto, el guardameta debe parar, mandar y ofrecer seguridad a sus compañeros”.
De niño se fijaba mucho en el legendario Gianluigi Buffon, “que tiene el estilo de portero que me gusta, seguro, que no se complica la vida y siempre está cuando debe estar”. Como otros compañeros, piensa en el ‘día después’ y estudia Integración Social “porque toda la vida he tenido ese sentimiento de ayudar a la gente, siempre he tenido una gran facilidad para empatizar, por eso no genero ningún problema en un vestuario, soy amigo de todos. Estoy contento con lo que estudio; es algo muy vocacional, es muy bonito ayudar a la gente y a ver si puedo más adelante hacer algún grado de Psicología”.
Recuerda Patxi con especial cariño el momento que le tocó al salir de casa, “la experiencia de vivir solo, estar en un lugar que no es tuyo, conocer gente nueva… Eso es lo que más me ha aportado el fútbol a mi vida”.
Recalca que “la asociación está haciendo un gran esfuerzo, y más en estos tiempos que vivimos, organizando estas sesiones AFE. Es una iniciativa muy positiva y quiero destacar que el ambiente que se vive es de equipo profesional. Es una oportunidad única. Contamos con unos profesionales, caso de Emilio López Fernández, el preparador de porteros, como la copa de un pino”.
Por último, Patxi reconoce que no le importaría “coger las maletas e irme al fin del mundo” para seguir su carrera deportiva. “Tengo buen nivel de adaptación, buen nivel en cuanto a idiomas… No tendría problemas en irme fuera de España, que el fútbol me sirva no sólo para jugar, también para aprender otras cosas”.