Kameni, un portero campeón olímpico que sigue aprendiendo cada día
Idris Carlos Kameni es con 37 años el más veterano del grupo que integra la selección de jugadores de la edición XXV de Sesiones AFE. El veterano guardameta no necesita presentación. Es de sobra conocido en España, tras dejar su huella desde que llegara en 2004 al R.C.D. Espanyol y su posterior paso al Málaga C.F.
Esta va a ser su primera experiencia en Sesiones AFE, aunque dice que se hubiera inscrito el año pasado, puesto que ya en la anterior temporada estuvo sin equipo. Este año, un delegado de AFE, antiguo compañero suyo, le informó de esta gran posibilidad cuando “me llamó después de ver una entrevista mía y me dijo que existía la oportunidad de poder entrenar para que me vieran. Llamas a equipos y te hablan de tu edad y del tiempo que llevas sin jugar, pero sin saber cómo estás físicamente. No dudé un segundo y me apunté”.
Con el Juventud Torremolinos
Físicamente se encuentra “bien. Estoy bien de peso y con una buena base para afrontar los entrenamientos”, explica. Además, en ningún momento ha descuidado su preparación. Ha estado entrenando con el Juventud Torremolinos, un club muy modesto, y “flipaban al verme entrenar con las mismas ganas. A veces, en campo de hierba artificial; otras, en tierra. Mi nombre lo he labrado en el campo con mucho trabajo, y a mí no me lo van a quitar. Pero eso lo dejo a un lado y cuando toca entrenar lo hago como si yo no fuera nadie, algo que considero clave”.
El último equipo en el que ha jugado ha sido el Fenerbahçe turco. Campeón de la Copa del Rey con el R.C.D. Espanyol, internacional con la selección de Camerún, con la que disputó el Mundial de 2010, Kameni empezó a jugar al fútbol “como todos los niños africanos, en la calle, descalzo… Y cuando no había pelota, jugábamos con papel enrollado en una bolsa de plástico”.
Con 16 años se colgó la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Sidney-2000, después de que Camerún ganara a España en la final. Algo que ha recordado recientemente y que estuvo “hablando con Tamudo, un excompañero que jugó aquella final”.
Destacó en equipos de Francia y fue otro gran guardameta, N’Kono, quien le convenció para que fichara por el R.C.D. Espanyol, club que eligió a pesar de tener ofertas de Inglaterra. Ahora valora todo lo conseguido a lo largo de su carrera profesional y se ha dado cuenta de que “lo mío ha sido exigirme más cada día para poder mantenerme”. Podría apuntar como referentes a grandes porteros que siguen en la élite, como por ejemplo Buffon, pero Kameni explica que se fija “en todos, desde los veteranos hasta los más jóvenes. Yo he entrenado con el Juventud Torremolinos y le he dicho a César, uno de sus porteros, que de él también aprendía”.
Un jugador más
Por eso está en estas Sesiones AFE, “no con el nombre Kameni, sino como un jugador más que quiere aprender durante estas dos semanas, pensando en tener una oportunidad en algún club, pero sabiendo que lo más importante es aprender cada día con la gente con la que voy a convivir”.
Kameni afronta esta oportunidad que le brindan las Sesiones AFE “con mucha ilusión. Me ha parecido todo muy profesional por su organización. Estoy deseando ponerme las botas, los guantes y trabajar con los compañeros”.