Futbolistas y big data: “Transparencia, garantías y protección permanente”
¿Cómo se tratan los datos de los y las futbolistas? ¿Quién o qué empresas sacan un beneficio de los mismos? ¿De qué clase de datos hablamos? Cuestiones que para la Asociación de Futbolistas Españoles son de vital importancia y que fueron analizadas y debatidas en una interesante y necesaria jornada organizada por el sindicato. ‘Big Data y futbolistas: contexto jurídico del tratamiento de sus datos personales’, celebrada en nuestra sede y en la que relevantes invitados a invitadas de diferentes ámbitos abordaron en profundidad para dar respuesta a muchos interrogantes.
Jornada dirigida y moderada por María José López, codirectora de la Asesoría Jurídica de AFE, arrancó con una ponencia de Cristina Martín Sánchez (abogada del Área Compliance & Data de Dikei Abogados), tuvo continuación con dos mesas redondas. La primera, protagonizada por Jade Boho (exfutbolista y delegada de AFE), Alexis Martín-Tamayo ‘MisterChip’ (periodista especializado en datos) y Sara Carmona (directora del Departamento de Análisis de Datos de You First. La segunda, por José Luis Piñar (responsable de Protección de Datos de la Real Federación Española de Fútbol), Gil Perea Crespillo (abogado de LALIGA) y Alejandro Arroyo (adjunto al Departamento de Análisis de Driblab.
A la jornada asistió David Aganzo, presidente de AFE. María José López, a modo de introducción, indicó que “la asociación quiere abrir un debate sobre un tema que nos preocupa como es la protección de los datos de los y las futbolistas. Confrontar y aportar ideas entre las instituciones involucradas es algo que consideramos muy importante”.
En su ponencia, Cristina Martín Sánchez reflexionó sobre el marco jurídico, nacional e internacional, en relación a la protección de datos, en este caso concreto centrado en los y las futbolistas. “Entiendo la preocupación de AFE sobre este asunto”, sentenció, entendiendo que ellos y ellas “deben poder mantener el control de sus propios datos”. En concreto, centró su exposición en lo establecido en el Reglamento General de Protección de Datos (RGPD), el reglamento europeo relativo a la protección de las personas físicas en lo que respecta al tratamiento de sus datos personales y a la libre circulación de estos datos en la UE y el Espacio Económico Europeo.
Recordó la abogada que el derecho a la protección de los datos es un derecho fundamental que se recoge en la Constitución Española, subrayando la importancia de “proteger los datos relacionados con la salud física y mental, incluidos los obtenidos mediante dispositivos tecnológicos. Para emplearse los mismos, puede ser necesario, en muchos casos, el consentimiento del/la interesado/a. Igual que tampoco me puedo olvidar de un asunto importante como es el reconocimiento facial”.
Recalcó Cristina Martín Sánchez que “los datos deben estar siempre protegidos, en todo momento y con las herramientas adecuadas”, incidiendo en que “nunca debemos olvidar que la relación del/la futbolista es laboral. Y por ello se deben extremar las cautelas” sobre el tratamiento y difusión de sus datos. “No tenemos constancia de que la Agencia Española de Protección de Datos se haya manifestado sobre el tratamiento masivo de datos de futbolistas”. “Creo que falta información y control y no sé qué nos deparará el futuro”, dijo.
Otro tema de interés que se sacó a relucir tras su ponencia es el uso de los datos por parte de terceros, como por ejemplo las casas de apuestas, algo que algunos/as futbolistas de determinadas culturas rechazan. “Los y las futbolistas deberían estar informados/as de las cesiones de sus datos a terceros. ¿Cómo? Lo desconocemos”, dijo Cristina Martín Sánchez. Se habla de “interés legítimo” en muchos casos, “pero no hay constancia de la existencia de textos informativos suficientes para los y las futbolistas”, indicando que “hay escasa información en muchas páginas web de entidades que tratan sus datos”, empleando la palabra “opacidad” al referirse a las mismas.
“A veces no nos damos cuenta de que trabajamos con datos personales, algo que generaría malestar en otro tipo de trabajo en el caso de que se publicaran informaciones sensibles”, reconoció Alexis Martín-Tamayo ‘MisterChip’ en su primera intervención. “¿Hasta qué punto es legal, lícito o moral publicar esos datos?”, se preguntó, ya que “pueden afectar a sus carreras deportivas. Recordó el método de trabajo de Monchi, exdirector deportivo del Sevilla, “emplea el big data de un modo muy inteligente y que puede ahorrar dinero a un club. Con el filtrado de datos y el ojo humano, ya puedes reducir el número de objetivos al acometer un fichaje y atinar”.
“En You First empleamos los datos para beneficio de nuestros y nuestras clientes. Son elementos de lujo, un gran complemento para reducir riesgos”, señaló Sara Carmona. “Picos de rendimiento, datos de futbolistas con y sin balón… Muchos de ellos, al detalle, Ofrecemos, en una palabra, un servicio extra. Un agente es más que un negociador de contratos, es un asesor integral, hasta un confidente”.
También reconoció que “para captar talento también utilizamos los datos, pero puede ser una trampa si no los contextualizas. Por ello, hay que elegir buenos filtros sin olvidar nunca el factor humano. El dato, en resumidas cuentas, debe ser un complemento”.
Exfutbolista de élite y en la actualidad delegada de AFE, Jade Boho expuso el punto de vista de un/a deportista. Recordando que “he vivido mi carrera profesional cuando no existía nada de lo que estamos debatiendo”, evocó su etapa en Inglaterra durante dos temporadas. “época en la que descubrí lo que era el big data. El análisis de datos tiene su parte positiva, pero en todo momento debes saber en qué fallas. Puedes asumirlos como una crítica constructiva para mejorar tu rendimiento”.
Muy relevante fue lo que manifestó en relación a los contratos que firman los y las futbolistas, “pues muchas veces no saben lo que están firmando en cuanto a la cesión de los datos al club. Deben estar protegidos/as porque todo tiene un valor, en este caso los datos, como por ejemplo los derechos de imagen. Por ello, los datos también se deben contemplar en los contratos”. “No somos robots… Creo que la combinación perfecta es emplear los datos y el ojo humano. Porque a un o una futbolista hay que ir a ver cómo entrena, cómo compite, etc.”, enfatizó.
“La protección de datos es una cuestión complicada”, comenzó diciendo José Luis Piñar, “un ámbito en el que no se prohíbe casi nada, ni cómo hacerlo”. “Eso sí, hay que emplear los datos con garantías porque hablamos de un derecho fundamental. Es muy importante concienciar, normalizar la cultura de la protección de los datos”, significó.
El representante de la RFEF sí tiene claro que “hablamos de un asunto muy serio a la hora de firmar un contrato, una cláusula, etc. Para mí, lo peor en este ámbito es el fundamentalismo, pero hay que adoptar medidas para garantizar la protección de esos datos. Hay desconocimiento sobre lo que se firma y por ello las cláusulas deben ser muy claras. Los datos pueden beneficiar mucho, pero también perjudicar, por lo que la transparencia es esencial”.
Para José Luis Piñar “es muy importante tener una responsabilidad proactiva, saber qué medidas se adoptan. En el ámbito del fútbol, por ejemplo, los datos sobre la salud. ¿Qué se puede reflejar en un acta?”. Igual que apuntó a otra cuestión muy relevante, “los datos de los y las menores de edad, que se están tratando de manera constante. Hay que ser cautos con esos datos, igual que en la firma de un contrato en el que aparecen cláusulas que pueden desconocer los y las futbolistas”. Y se cuestionó “¿qué datos sobre sanciones, por ejemplo, deben ser o no públicos?”.
A modo de ejemplo, en un caso reciente, Piñar señaló que “la Dirección General de Ordenación del Juego nos requirió una información relacionada con apuesta deportivas y la RFEF entendió que eran demasiados los datos que nos pedían. Tras consultar, la Agencia Española de Protección de Datos nos instó a darlos al tratarse de un tema de interés público”.
Gil Perea Crespillo, abogado y asociado de Broseta Abogados, firma que trabaja con LALIGA, reconoció que “interesa adquirir información de futbolistas. En nuestro caso, tiene asignada la organización de la competición y se tiene siempre en cuenta la finalidad de los datos que se emplean. La recogida de los mismos es para mejorar el producto final”. Y, como el representante de la RFEF, cree que “la transparencia debe ser un principio básico, que los y las futbolistas conozcan sus derechos, saber cuál es el tratamiento de sus datos. Hay una responsabilidad proactiva por parte de las instituciones y en LaLiga somos sensibles con este tipo de asuntos”
“Queremos que, durante los eventos, se transmita información”, comentó, explicando que “más que el tratamiento individual de los datos, a LaLiga le importan más las estadísticas. Se busca, en una palabra, organizar la competición de la mejor manera merced a la información de la que dispone”.
“Vivimos la época de la cultura del dato”, afirmó Alejandro Arroyo, representante de una empresa puntera en el ámbito del tratamiento de datos de los y las futbolistas, porque somos una consultora que ha visto el crecimiento de la industria en relación a los datos. Trabajamos con clubes en materia de scouting”, remarcando también que “el dato no puede sustituir al ojo humano. En nuestros informes recomendamos, por ejemplo, un fichaje, pero al mismo tiempo el club te pide que le convenzas de tu trabajo”.
“Nuestro trabajo ha crecido y tenemos cobertura en 200 competiciones”, destacó, poniendo en valor un trabajo que realizó su empresa con el Real Betis cuando traspasó a Fabián Ruiz el Nápoles: “Nos preguntaron por un sustituto y el primero en nuestra lista era Lo Celso, que finalmente fichó”. “Se trata de un mundo apasionante y las posibilidades son inmensas”, destacó.
Así se desarrolló una jornada con la que AFE pretende involucrar a todos los operadores del mundo del fútbol, pues se trata de un asunto que preocupa a la asociación y que ocupará gran parte de su trabajo con el fin de proteger los legítimos derechos de los y las futbolistas.